miércoles, 30 de marzo de 2016

146 - Paulo Freire y Enrique Pichon-Rivière

(Publicado en FMM Educación con fecha 30/3/2016 y en A.P.S.R.A. - Contenidos Teóricos con fecha 7/6/2016)

PAULO FREIRE Y ENRIQUE PICHON-RIVIERE

Puesto que no hay lecturas inocentes, empecemos por confesar de qué lecturas somos culpables. Louis Althusser.

Enrique Pichon-Rivière (1907-1977) en la República Argentina, y Paulo Freire (1921-1997) en la República Federativa del Brasil, estuvieron fuertemente consustanciados con la democratización del conocimiento como un factor favorecedor de los individuos y de los grupos. Como creadores, cada uno fue portavoz de su tiempo y de su lugar de actuación, con una extendida repercusión mundial. Si bien no llegaron a conocerse son muchos los puntos de confluencia entre ambos, de los que haremos una breve síntesis a continuación a modo de homenaje y reconocimiento a tanta labor social, teniendo en cuenta su condición de pensadores de nuestra América Latina.

Para ambos el aprendizaje era una cuestión política. Paulo Freire, experto en temas de educación, fue al encuentro de los excluidos de su país. Su idea era que el abordar el  problema del analfabetismo significaba embestir de lleno a la conciencia dominante. Enrique Pichon-Rivière, médico psiquiatra, hizo algo similar pero en el territorio de la marginalidad de los enfermos mentales. Consideraron que la persona no debía ser valorada de manera individual sino como sujeto social, productor y a la vez producido por su propio cosmos. Entendieron al ser humano como constituyéndose en una praxis de mutua determinación con el mundo.

Pichon-Rivière fundó aquí la escuela de psicología social, en la cual su didáctica estuvo destinada no sólo a comunicar conocimientos (tarea informativa) sino  básicamente a desarrollar aptitudes y a modificar actitudes (tarea formativa). Y Freire, por su parte, creyó que el saber no radicaba únicamente en acumular conocimientos, sino en un aprender mediante una conciencia crítica. Él combatió la llamada pedagogía bancaria que hace del educando un recipiente a ser llenado por el educador, para propiciar su concepción problematizadora que conlleva una visión crítica del universo. Muy similar, pues, a  lo que vemos como crítica de la vida cotidiana.

Consideraron que el ser humano cambiando su propia existencia cotidiana sufría los efectos de su propia transformación. Así, se opusieron a todo sistema educativo que representara una estructura autoritaria, jerárquica y rígida; teniendo siempre como meta el desarrollo y la protección del hombre, de su humanitas. La lectura del mundo que hicieron nunca fue inocente, pues los dos bien sabían de la necesidad de modificar las relaciones de poder imperantes, como también que tanto el aprendizaje como la educación debían convertirse de modo inexorable en un proceso político. Y por ello ambos fueron perseguidos por los gobiernos militares de turno.

La propuesta pichoniana propició una educación abierta a todo aquel que estuviera  interesado, sin restricción ninguna. Como decía el maestro, la única condición para estudiar psicología social era ¡estar vivo! Esa idea no sólo amplió el espectro de los posibles convocados, sino que delineó con nitidez el campo del saber que Pichon-Rivière deseaba indagar, aplicar y transmitir. Él quiso formar agentes del cambio social planificado capaces de trocar dialécticamente lo real en la medida de lo posible. Así, poder  actuar teniendo una clara concepción del mundo y con técnicas concretas que sirvan para una mejor adaptación activa a la realidad.

La pedagogía crítica de Freire creyó que el conocimiento se debía construir desde las distintas circunstancias que estuviesen afectando al maestro y al aprendiz; a ambos como sujetos políticos en acción. Su propuesta de alfabetización de adultos, liberadora  y conscientizadora, permitió al educando convertirse en alguien capaz y responsable a los fines de ir desarrollando una mirada crítica, para erigirse en un agente de cambio y de producción cultural. La educación freireana fue concebida como un instrumento de la libertad; un transformar y transformarse entendidos como concreta herramienta de modificación de la vida cotidiana, del individuo y de los grupos.  

Para concluir podemos preguntarnos: ¿de qué lecturas del mundo son culpables estos dos intelectuales latinoamericanos? Tal vez de percatarse que el sujeto no es en modo alguno individuo, sino el resultado de un complejo proceso histórico, social y cultural. La interpretación del mundo que ambos hicieron estuvo plasmada por una perspectiva política e ideológica muy definida: ellos no se limitaron a analizar la realidad, pues de lo que se trataba era de modificarla. Quizás Paulo Freire y Enrique Pichon-Rivière siempre supieron que las personas se humanizaron en el instante en que comenzaron a escribir su universo, es decir, a reinventarlo.

RONALDO WRIGHT    
www.ronaldowright.com          

martes, 1 de marzo de 2016

145 - Proteger las Conquistas para Niños y Jóvenes

(Publicado en la revista de cultura y política La Tecl@ Eñe - Año XV Nro. 70 correspondiente al bimestre enero - febrero de 2016 y en Red de Comunicadores del Mercosur - RedComSur con fecha 7/3/2016)

PROTEGER LAS CONQUISTAS PARA NIÑOS Y JOVENES

En los últimos años hemos destacado numerosas conquistas referidas a nuestra niñez y juventud; todas ellas de carácter netamente inclusivo ya sea en lo social, en lo político, en lo económico, en lo cultural, y así siguiendo. El combate contra la exclusión deberá  seguir llevándose a cabo también y, sobre todo, bajo la modalidad preventiva; es decir, esforzándose por intervenir con políticas públicas en el corazón mismo de los procesos de la producción y del reparto de las riquezas colectivas.

Ello en pos de obtener no solamente la igualdad de derecho de nuestros pibes sino un objetivo mucho más profundo, un logro más actual: cual es la igualdad de hecho. Los procesos de marginalización y de exclusión afectan severamente a los más jóvenes, dejándolos por fuera de los circuitos activos de intercambios sociales. Es una población que no tiene que sufrir un déficit de integración con respecto a la educación, la salud, el trabajo, la vivienda, la seguridad social, etc.

En tal sentido señalamos los avances provenientes de la ley de protección integral de los derechos de niñas, niños y adolescentes; la asignación universal por hijo; el plan Progresar o programa de respaldo a los estudiantes en todo el país; el derecho al voto de los adolescentes de dieciséis y diecisiete años de edad, con el claro propósito de continuar ampliando ciudadanía; las mesas de trabajo denominadas Jóvenes por los Jóvenes, que es esencial que sigan con apoyo y promoción.

Se puede también aludir a la construcción y el fortalecimiento de las Casas Educativas Terapéuticas (CET) y de los Centros Preventivos Locales de Adicciones (CePLA), en el marco de la previsión de la droga-dependencia y de la lucha contra el narcotráfico; la labor del Ente Nacional de Alto Rendimiento Deportivo o ENARD, que brinda un buen apoyo económico para la organización de competencias nacionales e internacionales, además de la cobertura médica asistencial de los participantes.

Y que los chicos y chicas sigan nucleados en el programa nacional La Patria es el Otro, formando y organizando equipos para así prestar auxilio a los más necesitados, sobre todo ante los siniestros y las catástrofes ambientales que suelen aquejarnos de tanto en tanto. Ellos van logrando, pues, construir un nuevo paradigma con ideales propios y con su base en una real ética humanista, que va dando por tierra con el aislamiento que produce tanta posmodernidad líquida y fluida.

El plan Decir es Poder reunió a jóvenes que se recibieron o son estudiantes avanzados, con la idea de erradicar el analfabetismo en la Villa 21 y que sean los mismos pibes del barrio —que tuvieron la oportunidad de concurrir a la escuela— los protagonistas de esa tarea. En el Tercer Encuentro Nacional de Radios Escolares los chicos compartieron diversas herramientas para seguir creciendo y profesionalizar sus prácticas radiales. Es otra forma de hacer más plurales las voces que circulan.

Con lo hasta aquí expuesto no se pretende agotar la nómina de las conquistas, sino simplemente enumerar algunas de ellas para ilustrar acerca de qué estamos hablando. El cambio de gobierno que acaba de tener lugar en nuestro territorio—y una reñida elección presidencial que dividió a los votantes prácticamente en dos partes iguales— ha reavivado este tema ampliamente, de la izquierda a la derecha del tablero político. Entre otras cosas está en cuestión el mantener o no lo conseguido.

Habrá que entender que la demanda social no es en la actualidad sólo expresión de los grandes grupos dominantes, sino que también está arraigada en esos niños y jóvenes involucrados, que pueden aún no entender hacia dónde marchan las cosas públicas. Es nuestra propuesta que se continúe el trabajo para que ellos no se conviertan en los más desprotegidos y se vean privados de participar en un buen número de conquistas  colectivas, amenazados de caer en una realidad más degradada.

Este juego recién empieza, si bien ya ha habido muestras del nuevo rumbo que siguen  las autoridades ejecutivas del país. Pero aún falta que comiencen a funcionar ambas cámaras en el Congreso de la Nación, que esperamos puedan causar un equilibrio de fuerzas institucionales más sano. Lograr ser garantes de la cohesión social y agentes protectores de los más débiles. También, por supuesto, está por verse lo que hagan nuestros pibes y pibas en protección de sus derechos y garantías.

RONALDO WRIGHT                              
www.ronaldowright.com